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Un aspecto poco estudiado de los sistemas de salud es el impacto de la calidad del personal médico sobre el desempeño de salud de los usuarios del sistema. Un trabajo de investigación en el que participa Christian Posso, investigador del Banco de la República, y cuyos resultados se publicaron recientemente en la serie Borradores de Economía, estudia precisamente el impacto de las habilidades de los médicos en la salud de las personas en Colombia. En particular, el estudio evalúa el efecto de las diferencias en habilidades profesionales de médicos con formación similar sobre la salud de los bebés recién nacidos bajo su cargo.

Para responder la pregunta de investigación, los investigadores analizaron el programa de Servicio Social Obligatorio (SSO) del Ministerio de Salud que, en los años 2013 y 2014, asignó de forma aleatoria médicos recién graduados a diferentes hospitales pequeños del país. De esta manera, la asignación de médicos a distintos hospitales rurales se asemeja a un experimento, que permite la evaluación de sus efectos causales sobre los resultados de salud de los pacientes.

Para el desarrollo del estudio se creó un conjunto de datos innovador que vincula siete cohortes de este programa SSO con diferentes bases de datos administrativas, recopilando información tanto de los médicos como de los recién nacidos. En el caso de los médicos, se recopila información socioeconómica de sus familias, así como de la universidad de la que se graduaron. Se recopila además información de las pruebas Saber Pro en Medicina aplicadas por el Icfes, que sirve como medida de su habilidad. Para medir la salud de los bebés, se utilizan variables en el nacimiento a través de las estadísticas vitales del Dane.

El análisis empírico se basa en modelos econométricos que permiten inferir el efecto de los puntajes de las pruebas Saber Pro de los médicos sobre la salud observada de los bebés nacidos bajo su cargo. Los resultados de las estimaciones muestran que una desviación estándar del puntaje de la prueba Saber Pro del médico asignado disminuye en 6.3 % la probabilidad de mala salud de los bebés recién nacidos. Específicamente y como se ilustra en el Gráfico 1, un aumento de una desviación estándar en el puntaje disminuye la probabilidad de nacimientos con bajo peso, de nacimientos prematuros y de bebés con bajo puntaje Apgar, que es un índice especializado que agrupa otras medidas de salud perinatal. Adicionalmente, estos efectos benéficos de la calidad de los médicos son significativamente más pronunciados en los casos de bebés nacidos de madres vulnerables. Valga anotar que todos los resultados son estadísticamente significativos y descuentan el efecto de otros factores que pueden afectar la salud de los recién nacidos, como el tamaño del municipio y hospital, la proporción de niños con bajo peso al nacer y prematuridad en el hospital en 2012, el sexo del recién nacido, y el grado de educación, edad y estado marital de la madre.

La principal conclusión del estudio es que los médicos con mayores habilidades médicas agregan significativamente más valor a la salud de los recién nacidos, independientemente del contexto en que estén. Este resultado resalta la importancia de la formación médica y su promoción para el bienestar de la sociedad. Una importante implicación adicional de política pública es que la calidad de los médicos tiene capacidad de reducir las brechas socioeconómicas de los pacientes desde antes de su nacimiento.

Gráfico 1. Efecto relativo de un incremento de una desviación estándar en el puntaje de las pruebas SaberPro de los médicos sobre la salud de los bebés recién nacidos bajo su cargo.

Puntuación de Apgar menor a 7: -7,16 %; Prematuridad: -7,97 %; Bajo peso al nacer: -7,71 %; Mala salud: -6,31 %