Política monetaria
La política monetaria comprende un conjunto de medidas para alcanzar unos objetivos específicos en una economía. En Colombia la política monetaria está a cargo del Banco de la República y tiene como objetivos mantener un nivel de inflación bajo y estable, y alcanzar el máximo nivel sostenible del producto y del empleo. En otras palabras, los objetivos de la política monetaria se encuentran orientados a preservar el poder de compra de nuestro dinero, manteniendo la inflación baja y estable, así como contribuir para que nuestra economía produzca al máximo nivel de sus capacidades.
Para cumplir con estos objetivos el Banco de la República adoptó desde inicios de siglo una estrategia de política monetaria conocida como esquema flexible de inflación objetivo.
Política monetaria: artículo educativo
Esquema de política monetaria
Inflación objetivo
Para cumplir con el mandato constitucional de preservar el poder adquisitivo de la moneda y propender por un crecimiento económico sostenible, desde inicios de siglo la Junta Directiva del Banco de la República adoptó un esquema de política monetaria denominado inflación objetivo, orientado al cumplimiento de una meta de inflación, que permita mantener las expectativas de inflación alrededor de dicha meta, así como propender por alcanzar el máximo nivel sostenible de la producción y el empleo.
Esta estrategia se basa en comunicar explícitamente al público que todas las decisiones del Banco estarán centradas en mantener una inflación baja y estable, y por esta vía anclar las expectativas de inflación en la meta puntual anunciada por la Junta Directiva.
Cuando la autoridad monetaria tiene credibilidad y las expectativas de una inflación baja se consolidan, es altamente probable que estas incidan en el comportamiento de los agentes económicos y de la población y, por ende, en el ritmo de crecimiento de los precios, el cual sería cercano a la meta establecida por el Banco de la República.
En la actualidad la meta de inflación fijada por la Junta es del 3,0 % anual (con un margen admisible de desviación de ±1 punto porcentual).
Bajo este esquema, las expectativas del público sobre la inflación en el futuro tienen un papel fundamental, pues estas son la base para la toma de decisiones de ahorro, inversión y gasto de distintos agentes económicos que pueden afectar los precios al consumidor en la economía. Por tanto,
el Banco realiza un seguimiento importante a la formación de expectativas de inflación del público y comunica de manera oportuna y transparente sus decisiones de política monetaria.
Estrategia de inflación objetivo
Herramienta de política monetaria
Para cumplir los objetivos de política monetaria, la Junta Directiva del Banco de la República tiene como principal herramienta la tasa de interés de intervención, también conocida como tasa de política monetaria o de referencia. Con esta tasa de interés define su postura de política monetaria para conducir la inflación a su meta de 3 % anual.
Como herramienta complementaria de la política monetaria para regular la liquidez en la economía, se encuentran las operaciones de mercado abierto (más conocidas como OMA), los cuales son utilizados a diario para aumentar o disminuir la liquidez en la economía de acuerdo con sus necesidades, y lograr que la tasa de corto plazo (a las que se prestan los bancos entre sí) esté alineada con la tasa de referencia que ha definido la Junta Directiva.
Otra herramienta de apoyo a la política monetaria es el encaje bancario, el cual es una proporción (un porcentaje) que los establecimientos de crédito deben mantener como reservas en sus cajas o en sus cuentas en el Banco de la República por cada depósito que reciben del público.
Tasa de interés de intervención
Es la principal herramienta que tiene la Junta Directiva para conducir la política monetaria del país. Se le conoce como tasa de intervención porque es la tasa a la cual el banco central interviene directamente en el mercado monetario para suministrar o extraer liquidez del sistema; tasa de referencia porque sirve para el cálculo de otras tasas de interés, y tasa de política monetaria porque con ella la autoridad monetaria define su postura de política para conducir la inflación a su meta (3 % anual).
En la práctica, es la tasa de interés mínima que el Banco de la República le cobra a las entidades financieras por la liquidez que les suministra, generalmente a un día, mediante operaciones repo. Además, sirve como referencia para establecer otras tasas de interés como, por ejemplo, la tasa máxima que el Banco les paga por recibirles dinero que tengan como excedente.
Las modificaciones del nivel de la tasa de interés de intervención que hace la Junta Directiva tienen como fin influir, con cierto rezago y distintas vías, en el crecimiento de corto plazo y la variación de los precios al consumidor.
Este objetivo se logra a través de distintas vías, que conocemos como los canales de transmisión de la política monetaria, los cuales se basan en la relación que tiene dicha tasa de interés de intervención con otras variables macroeconómicas como: las tasas de corto plazo, las tasas de interés de captación y colocación del sistema financiero, la tasa de cambio, o las expectativas de inflación futura de los agentes económicos.
Esta transmisión permite que los cambios en la tasa de intervención tengan un efecto sobre las decisiones de ahorro, inversión, gasto, el nivel de la tasa de cambio y las decisiones de ajuste de precios en la economía, los cuales generan a su vez cambios en los niveles de precios de la economía y el producto. Estos efectos son explicados por separado en el apartado de canales de transmisión de la política monetaria.
¿Qué es la tasa de intervención?: artículo
Tasa de interés de política monetaria: estadística
Operaciones de mercado abierto (OMA)
Las operaciones de mercado abierto (más conocidas como OMA) es el principal instrumento del Banco de la República para afectar la cantidad de dinero (o liquidez) en la economía.
Para entender mejor las OMA, recordemos que cuando hay menos dinero en la economía, conseguirlo es más difícil (y más costoso), por lo que la tasa de interés sería más alta. Por su parte, cuando hay bastante liquidez en la economía (más dinero disponible), conseguirlo es más sencillo, por lo que su costo sería más barato, es decir, una tasa de interés menor.
En este sentido, las operaciones de mercado abierto son fundamentales en la labor del Banco como autoridad monetaria, ya que al afectar la liquidez de la economía estaría influyendo en el nivel de la tasa de interés de corto plazo, y con esto lograr alinearla con la tasa de intervención que fija la Junta Directiva, lo cual es coherente con el cumplimiento de los objetivos de la política monetaria.
Las OMA se caracterizan como transacciones que ocurren entre el Banco de la República y ciertas entidades del sistema financiero (conocidos como agentes colocadores de OMA), en las que se intercambia liquidez por títulos que otorgan la propiedad de un activo financiero avalado por el Banco.
Por medio de las OMA el Banco de la República puede entregar o recoger liquidez de la economía, al comprar o vender títulos financieros, respectivamente (como los de deuda pública).
Las OMA de expansión
A través de las OMA el Banco puede entregar o recoger liquidez de la economía.
En caso de prever que se presentan necesidades de liquidez en la economía, que conlleve una posibilidad para que la tasa de corto plazo sea más alta que la tasa de intervención (se desalineen), el banco central puede otorgar liquidez mediante las OMA de expansión y así influir para que la tasa de corto plazo disminuya y regrese al nivel deseado.
Estas OMA pueden tener una naturaleza transitoria o permanente determinada por la manera como se quiera otorgar dichos recursos a la economía.
Si el banco central decide otorgar liquidez de manera transitoria, puede hacerlo con la compra de manera temporal de títulos financieros.
Esta operación se conoce como compra temporal con pacto de recompra (operaciones repo), porque después de un tiempo pactado, el Banco de la República debe vender de nuevo los títulos a las entidades a las cuales se los compró. En este caso, el Banco cobra una tasa de interés por la liquidez brindada a la entidad financiera con la que realizó esta operación. La tasa mínima de estas subastas de expansión es la tasa de interés de intervención vigente en el día de la operación.
Por otro lado, si el banco central desea otorgar liquidez a la economía de forma permanente, entonces realizará compras definitivas de activos financieros, como por ejemplo los títulos de deuda pública.
Las OMA de contracción
A través de las OMA el Banco puede entregar o recoger liquidez de la economía.
En caso de prever que se presentan excesos sobre la liquidez necesaria en la economía, lo que podría alejar hacia abajo la tasa de interés de corto plazo de la tasa de intervención del Banco, el banco central puede retirar dichos excesos empleando las OMA de contracción, y así influir para que la tasa de corto plazo aumente y retorne a su nivel deseado.
Estas OMA pueden tener una naturaleza transitoria o permanente determinada por la manera como se quiera retirar la liquidez de la economía.
Si el banco central quiere retirar liquidez de manera transitoria, puede hacerlo ejerciendo la venta temporal de títulos financieros.
Esta operación se conoce como “repo en reversa” y en ella se realiza la venta temporal con pacto de recompra, porque después de un tiempo pactado, el Banco de la República debe comprar de nuevo los títulos a las entidades a las cuales se los vendió.
Por otro lado, si el banco central desea retirar liquidez de la economía de forma permanente, entonces realizará ventas definitivas de títulos de deuda pública.
Es importante anotar que esta es una de las estrategias disponibles que tiene el Banco para contraer la base monetaria. Sin embargo, existen otras alternativas más frecuentes que se utilizan, como lo son los depósitos remunerados no constitutivos de encaje (DRNCE), con los que incentiva a las entidades financieras para depositar los excesos de liquidez en sus cuentas de depósito que tienen en el Emisor, a cambio de una remuneración. Con estos depósitos, se recoge dicho exceso del mercado, influyendo para que la tasa de corto plazo aumente y retorne al nivel deseado (el mismo que la tasa de interés de intervención).
Operaciones de mercado monetario (OMA)
Encaje bancario
El encaje bancario es un instrumento complementario de la política monetaria, en la medida en que influye indirectamente sobre la cantidad de dinero de la economía (liquidez).
En la práctica, es una proporción (%) que las entidades financieras que reciben depósitos o captaciones del público deben mantener como reservas en sus cajas o en sus cuentas en el Banco de la República por cada depósito que reciben de sus clientes.
Este requerimiento garantiza que las entidades cuenten con la liquidez necesaria para asegurarles a sus depositantes la disponibilidad de su dinero.
Ejemplo: con un encaje de 11 %, si un cliente deposita $100 en su cuenta de ahorro o corriente, la entidad financiera deberá guardar $11 obligatoriamente y podría conceder préstamos por $89.
Si el encaje disminuye a 8 %, y un cliente deposita $100 en su cuenta de ahorros o corriente, la entidad deberá guardar solo $8 y podría prestar $92 a sus clientes, lo cual significa que habría más recursos disponibles (liquidez) en la economía.
Encaje bancario
Canales de transmisión de la política monetaria
Cuando la Junta Directiva toma una decisión sobre el nivel de la tasa de interés de intervención, inicia una cadena de acontecimientos que, con cierto rezago y por diferentes vías, terminan influyendo en la demanda agregada de la economía y en la variación del nivel de precios. Estos sucesos son lo que conocemos como los canales de transmisión de la política monetaria, los cuales se basan en la relación que tiene la tasa de interés de intervención con otras variables macroeconómicas como: la tasa de interés de corto plazo, las tasas de interés de captación y colocación del mercado, la tasa de cambio, o las expectativas de inflación de los agentes económicos.
Estos mecanismos de transmisión permiten que las decisiones sobre la tasa de intervención del Banco de la República tengan un efecto sobre las decisiones de ahorro, inversión, gasto, el valor de la tasa de cambio, y las decisiones de ajuste de precios en la economía, los cuales generan, a su vez, cambios en los niveles de precios de la economía y el producto. Es importante anotar que, si bien los efectos de la política monetaria transitan por diferentes vías, estos pueden ser simultáneos y presentarse por distintos canales.
Entre los principales canales de transmisión de la política monetaria podemos encontrar los siguientes:
Tasa de interés: cambios en la tasa de interés de referencia (que es de corto plazo) deberían trasladarse a las tasas de interés de plazos más largos para distintos depósitos o instrumentos financieros.
Por ejemplo, si estamos en un momento de subida de las tasas de interés, los clientes del sistema financiero tendrían incentivos para depositar su dinero en las entidades en busca de mayores intereses, postergando sus decisiones de consumo e inversión, lo cual alteraría la demanda y, por tanto, la dinámica de los precios en la economía.
Crédito: la operación del canal de la tasa de interés puede ser reforzada cuando el crédito bancario es fuente especial de financiación de los agentes, ya que otro tipo de financiamiento les resulta oneroso o de difícil acceso, y en el caso de los bancos, cuando los créditos y las inversiones no son sustitutos perfectos.
En estas circunstancias, variaciones en la postura de política monetaria no solo alteran el nivel general de las tasas de interés, sino que, adicionalmente, afectan de manera especial a la oferta de crédito bancario de la economía. En consecuencia, el impacto de dichas variaciones en las tasas de interés de los préstamos se refuerza, así como su efecto sobre la demanda agregada y la dinámica de los precios.
Tasa de cambio: la variación de la tasa de interés de política puede contribuir a modificar la rentabilidad relativa entre los activos financieros del exterior y los internos, alterando la oferta y demanda de moneda extranjera.
Lo anterior generaría variaciones en la tasa de cambio nominal que afectarían tanto la dinámica de los sectores que comercian con otros países (sector transable) como los costos de producción asociados con los bienes intermedios importados.
Así, los precios podrían verse afectados por estas dos vías.
Precio de los activos: cambios en la tasa de interés de referencia que incidan en las tasas de interés de mercado podrían alterar el precio de los activos financieros y su valor como colateral. Recordemos que el precio de los activos financieros (como los bonos) tiene una relación negativa con las tasas de interés, por lo que una subida de las tasas del mercado disminuiría su precio. Esto tiene efectos en la riqueza de los hogares y las empresas, así como el costo del crédito al que acceden en estos mercados.
También podría modificar el valor del activo como colateral de crédito, lo que contribuiría a modificar la dinámica de la oferta y el gasto agregado de la economía y los precios.
Expectativas: la credibilidad de las acciones de política monetaria para el cumplimiento de la meta de inflación, permite anclar las expectativas de inflación de los agentes económicos y disminuye la incertidumbre sobre su senda futura. Esto refuerza y acelera el funcionamiento de los otros canales de transmisión.
También, facilita las negociaciones salariales y contribuye a tomar decisiones eficientes de gasto agregado. Todo lo anterior tiene un efecto directo sobre la dinámica de los precios.
En otras palabras, cuando los agentes económicos tienen confianza en el banco central y en sus acciones para el cumplimiento de la meta de inflación, seguramente realizarán sus ajustes de precios, acuerdos con proveedores y negociaciones salariales, entre otros, con incrementos en niveles muy cercanos a la meta de inflación y, por esta vía, se mantendría controlado el ritmo de crecimiento de los precios.
Canales de transmisión de política monetaria
Mecanismos de transmisión de la política monetaria
Política de intervención cambiaria
El artículo 372 de la Constitución Política de Colombia le asignó a la Junta Directiva del Banco la función de ser la autoridad monetaria, cambiaria y crediticia del país. Dentro de esta responsabilidad, la estrategia de política monetaria del Banco busca mantener una tasa de inflación baja y estable y alcanzar niveles del producto cercanos a su nivel potencial. Dentro de estos objetivos, la política del Banco también contribuye a la preservación de la estabilidad financiera y el buen funcionamiento del sistema de pagos.
Para que todos estos objetivos se cumplan, la Junta Directiva, como autoridad cambiaria, ha definido un régimen de flexibilidad cambiaria con intervención discrecional, el cual es considerado como un pilar fundamental para el cumplimiento de los objetivos de la política monetaria.
¿Qué es un régimen de tasa de cambio flexible?
Es un tipo de régimen cambiario donde el valor de una moneda extranjera (generalmente el dólar) en términos de la moneda nacional (nuestro peso colombiano) es determinado libremente por el comportamiento de la oferta y la demanda de dichas divisas en la economía nacional, sin ningún compromiso por parte de la autoridad cambiaria de mantener su nivel.
Esta flexibilidad del tipo de cambio que acompaña a la estrategia de política monetaria de inflación objetivo tiene tres finalidades principales. La primera es permitirle al Banco de la República tener una política monetaria independiente, es decir, utilizar libremente la tasa de interés de intervención como instrumento para conducir la inflación a la meta y aportar para acercar al producto a los niveles deseados, sin tener que ocuparse primordialmente del precio del dólar.
La segunda es que puede operar como una variable de ajuste que suaviza los choques externos que pueda recibir nuestra economía, como una caída en los precios internacionales del petróleo que afectan los ingresos efectivos de este sector, pero provoca un aumento en la tasa de cambio (depreciación) que beneficia a los exportadores, amortiguando de alguna manera este choque adverso a nuestra economía.
Una tercera finalidad es poder reducir de alguna manera la toma de riesgos excesivos en moneda extranjera por parte de los agentes de la economía, debido al riesgo cambiario que se presenta al tener una tasa de cambio flexible. Lo anterior se convierte en un factor fundamental para preservar la estabilidad financiera del país.
Intervención en el mercado cambiario
Pese a contar con un régimen de tasa de cambio flexible, el Banco de la República como autoridad cambiaria tiene la potestad para intervenir en el mercado de divisas. Por esto, nuestro régimen cambiario se conoce como uno régimen de libre flotación con intervención discrecional. Esta facultad no limita en ninguna medida su flexibilidad ni tampoco pretende fijar o alcanzar un nivel específico de tasa de cambio. Al contrario, todas las intervenciones se realizan con el fin de garantizar el cumplimiento de los objetivos de la política monetaria. En general, las intervenciones que pueda realizar el Banco persiguen tres objetivos particulares: 1) mantener un nivel de reservas internacionales adecuadas; 2) limitar la volatilidad excesiva de la tasa de cambio en el corto plazo, y 3) moderar apreciaciones o depreciación rápidas y excesivas de la tasa de cambio.
Como estas intervenciones en el mercado cambiario implican compras o ventas de divisas que son realizadas en pesos colombianos, esto conlleva una expansión o contracción monetaria, respectivamente. Para que esta situación no afecte la cantidad de liquidez disponible y aleje a la tasa de corto plazo del nivel de tasa de interés de intervención fijada por la Junta Directiva, las intervenciones cambiarias deben ser esterilizadas. Por ejemplo, si el Banco de la República compra divisas con pesos colombianos, aumentaría la liquidez en el mercado monetario, alejando hacia abajo la tasa de corto plazo de la tasa de intervención. Por esta razón, esos pesos adicionales deberán ser recogidos mediante alguno de los instrumentos disponibles que tiene el Banco para este fin.
Política de intervención cambiaria
Instrumentos para la intervención cambiaria
Proceso de toma de decisiones de política monetaria
Como se ha mencionado, la principal herramienta que tiene la Junta Directiva del Banco de la República para el control de la inflación es la tasa de interés de intervención. Las variaciones de esta tasa, y su relación con otros factores en la economía, permiten el cumplimiento de los objetivos de la política monetaria: mantener un nivel de inflación bajo y estable, y alcanzar el máximo nivel sostenible del producto y del empleo.
La Junta del Banco toma decisiones sobre el valor de esta tasa teniendo en cuenta el análisis del estado actual de la economía, sus perspectivas y la evolución del pronóstico de inflación frente a la meta definida. Si como resultado de este análisis se concluye que existen riesgos de que la inflación se desvíe persistentemente por encima de la meta en el horizonte en el que opera esta política, la autoridad monetaria aumentará su tasa de interés de intervención. Así mismo, si la economía excede un ritmo de crecimiento sostenible, recalentando la actividad económica, podrá ponerse en riesgo la estabilidad de los precios, por lo que el Banco subirá su tasa de interés para evitar caídas fuertes futuras en la producción y el empleo.
Proceso
En el proceso para llegar a una decisión de política monetaria participa un grupo de expertos, conocido como el equipo técnico del Banco. Durante este proceso este equipo busca obtener información y sustento técnico que permita responder las siguientes preguntas: ¿cómo está la economía?, ¿hacia dónde se dirige?, y ¿cuál es la senda de la tasa de interés de referencia que llevaría la inflación a la meta y estabilizaría el producto en sus niveles de largo plazo y, además, qué incertidumbre enfrenta dicha senda?
Una parte importante de este proceso son las reuniones previas que se hacen al interior del equipo técnico del Banco y de aquel con la Junta Directiva. En estas reuniones se analiza, consolida y prepara el pronóstico macroeconómico del equipo técnico para responder a las preguntas relacionadas con el estado de la economía y sus proyecciones.
Pronóstico macroeconómico
El pronóstico macroeconómico es un ejercicio de proyección de las principales variables macroeconómicas del país, en un horizonte de dos años, el cual está condicionado a supuestos y proyecciones de variables del exterior, a la evaluación del estado actual de la economía colombiana y a un comportamiento de la política monetaria que garantice el cumplimiento de los objetivos.
Este pronóstico es un ejercicio del equipo técnico del Banco, incluyendo sus supuestos, proyecciones y la interpretación de los datos que realicen los encargados del análisis. No obstante, la Junta Directiva o miembros individuales de ella pueden discrepar de algunos supuestos, parámetros o proyecciones que presentó el equipo técnico en su pronóstico macroeconómico; por esta razón, este no refleja necesariamente la opinión de la Junta o de sus miembros individuales, pero sí es un insumo para la toma de decisiones.
Este proceso de análisis culmina un día antes de cada reunión de política monetaria, con una reunión en la que el equipo técnico le presenta a la Junta Directiva el documento con su pronóstico macroeconómico y una recomendación de política monetaria.
Decisión de política monetaria
Finalmente, la Junta Directiva se reúne contando con toda la información disponible, incluyendo el pronóstico macroeconómico del equipo técnico y su recomendación de política monetaria. También, asiste el secretario de la Junta Directiva.
Las reuniones ordinarias se realizan a final de cada mes y en ocho de ellas (enero, marzo, abril, junio, julio, septiembre, octubre y diciembre) toman una decisión de política monetaria por votación de sus miembros, quienes poseen un voto cada uno, prevaleciendo el criterio de mayoría. No obstante, la autoridad monetaria tiene la potestad de tomar decisiones de política monetaria en las cuatro reuniones restantes (febrero, mayo, agosto y noviembres) si lo considera necesario.
De esta manera, las decisiones de política monetaria se basan en el criterio y conocimiento sobre la economía de cada uno sus miembros, quienes previamente han recibido la información del análisis realizado por el equipo técnico del Banco y han podido profundizar el estado actual y proyecciones en distintas reuniones con diferentes agentes económicos.
La decisión final sobre el nivel de la tasa de interés de referencia se toma por mayoría, y los principales factores y consideraciones que se tuvieron en cuenta para la decisión son informadas en un comunicado al finalizar la Junta. Al tiempo, el gerente general y el ministro de Hacienda y Crédito Público (quien preside la Junta) ofrecen mayores detalles de la decisión en una conferencia de prensa. Unos días después de la reunión, se publican las minutas de la Junta, donde se describen las posturas que llevaron a adoptar la decisión.
Proceso de toma de decisiones y comunicación
Reuniones y minutas de la Junta Directiva
Comunicación de la política monetaria
La comunicación del banco central está representada por la entrega de información al público, y versa no solo sobre sus decisiones de política monetaria sino también sobre sus objetivos, la estrategia de política monetaria y las perspectivas de la economía.
En este campo, el Banco de la República cuenta con distintos canales, entre los que se encuentran las conferencias y comunicados de prensa, las minutas, los reportes o informes periódicos (por ejemplo, el Informe de Política Monetaria) y los discursos y entrevistas de los miembros de la Junta Directiva.
La comunicación del banco central es un elemento muy importante de la política monetaria, debido a que los agentes de una economía y sus decisiones no solo se ven afectados por las acciones que en el presente toman los encargados de la política económica, sino también por las expectativas que tienen estos agentes sobre las intervenciones y el comportamiento de la economía en el futuro.
Es por esto que se considera que para que la política monetaria logre sus objetivos, es decir, que sea efectiva, requiere, entre otros, que el público entienda y en lo posible anticipe las acciones del banco central, para que de esta manera las expectativas estén coordinadas con los objetivos que se ha propuesto el banco central y contribuyan a conseguirlos.
Comunicación de política monetaria
Minutas
Comunicados
Informe de política monetaria
Presentaciones y discursos
Rendición de cuentas
La transparencia es un elemento presente en la estrategia de comunicación del Banco de la República e indispensable en el ejercicio de sus labores como banco central independiente. Con el ejercicio transparente de sus labores y su comunicación, el Banco genera confianza en los agentes de la economía, lo que es fundamental en la formación de sus expectativas y la toma de decisiones de manera acorde con los objetivos de política monetaria.
Frente a este ámbito, la ley colombiana estipula que la Junta Directiva debe presentar dos veces al año un informe al Congreso de la República, el cual es el representante de los intereses de todos los colombianos.
Este informe es presentado por la Junta Directiva en los meses de marzo y julio y contiene información relacionada con las condiciones y perspectivas de la economía, sus decisiones, la composición de las reservas internacionales, la situación financiera del Banco y sus proyecciones, y su gestión ambiental.
Informe de la Junta Directiva al Congreso de la República