La política monetaria comprende un conjunto de medidas para alcanzar unos objetivos claros que, en nuestro país, es el de preservar la capacidad de compra del dinero y contribuir a que la economía crezca a un ritmo coherente con sus capacidades.

Las políticas cambiaria y crediticia son un conjunto de medidas que fortalecen los objetivos de la política monetaria. Estas incluyen definir que la tasa de cambio sea flexible (es decir, que el precio que pagamos en pesos por cada dólar no sea determinado por ninguna autoridad sino por la oferta y la demanda en la economía), y definir la normatividad con la que se rigen los bancos comerciales y el sistema financiero.

De manera exclusiva, y sin delegárselo a nadie, el Banco produce y emite los billetes y monedas que se usan a diario en el país. Lo hace de forma responsable y de acuerdo con las necesidades de la economía.

Estas reservas son activos externos del país que están bajo el control del banco central y sirven para garantizar pagos al exterior como, por ejemplo, importaciones o intereses de la deuda externa, entre otros y, de ser necesario, para intervenir en el mercado de dólares. Como las reservas son de todos los colombianos, el banco central las administra como lo haría un ciudadano prudente: dándole prioridad a que estén seguras y disponibles rápidamente por encima de buscar una rentabilidad alta.

El Banco promueve el correcto funcionamiento de los pagos que se hacen a diario en el país, prestando diversos servicios a las entidades financieras. Por ejemplo, les otorga liquidez necesaria y suficiente, garantizando, además, que el sistema financiero se mantenga estable.

El Banco de la República está facultado para apoyar al Gobierno en ciertas operaciones económicas como, por ejemplo, en la emisión de títulos de deuda pública o recibiendo recursos públicos en las cuentas de depósito que tiene el Gobierno en el Banco, las cuales no van en contravía de las funciones y objetivos de política monetaria del Banco.

El Banco contribuye a gestionar adecuadamente el patrimonio cultural de la nación con una amplia red de bibliotecas, museos del oro y colecciones de arte y música. También realiza investigaciones, genera estadísticas, apoya la financiación de estudios en el exterior y promueve la educación económica relacionada con la banca central.