El Gerente General, José Darío Uribe, presentó el Informe trimestral de inflación a marzo de 2005

Fecha de publicación:
10:00

En el día de hoy, el Gerente General del Banco de la República, José Darío Uribe, presentó el Informe de Inflación correspondiente al primer trimestre de 2005 en la ciudad de Medellín. Desde comienzos de 2004, se vienen realizando presentaciones trimestrales de este informe, en el cual se hace un análisis detallado de la inflación y el crecimiento económico y sus perspectivas, que sirve de base para la toma de decisiones de política monetaria por parte de la Junta Directiva del Banco de la República. Esta es la primera ocasión en la que el Gerente General presenta este Informe fuera de la ciudad de Bogotá, como parte de su iniciativa de ampliar el suministro de información económica en el país.

Como conclusión de su presentación, el Gerente resaltó que "la política monetaria está funcionando bien, hecho que se demuestra por las siguientes razones: i) las metas de inflación se cumplen, ii) las expectativas de inflación son coherentes con las metas, iii) la credibilidad de la política monetaria es muy alta, y iv) el marco de política cada vez es mejor entendido por el mercado. Adicionalmente, la política monetaria ha contribuido a la suavización del ciclo económico, impulsando el gasto y el crecimiento del PIB y el empleo cuando la economía opera por debajo de su capacidad productiva y la inflación se dirige hacia las metas".

A continuación se presentan algunos apartes del Informe de Inflación correspondiente al mes de marzo de 2005, cuyo texto completo se encuentra publicado en la página web del Banco de la República: www.banrep.gov.co

  • La evolución de la situación inflacionaria en el primer trimestre se caracterizó por los siguientes hechos:
    • Descenso de la inflación total y de todos los indicadores de inflación básica, en especial el de la inflación sin alimentos.
    • Reducción de las expectativas de inflación durante el primer trimestre del año, como lo muestran las encuestas y la evolución de los diferenciales entre las tasas de interés de los TES de tasas fija y variable.
    • Disminución de la inflación de no transables, que en parte se explica por la reducción de las expectativas de inflación, pero que también podría reflejar la inexistencia de presiones de demanda importantes.
    • Reducción de la inflación de transables asociada con la apreciación del tipo de cambio.
  • Al mismo tiempo, la economía colombiana continuó creciendo en un contexto externo favorable. La economía mundial y la de nuestros principales socios comerciales presentan un alto dinamismo, aunque para el año se espera una menor expansión que la que se observó en 2004. Los términos de intercambio (relación entre el precio de las exportaciones y las importaciones) se mantienen altos, y los precios de algunos productos básicos de exportación podrían aumentar inclusive por encima de los niveles del año anterior.
  • Con las cifras del producto interno bruto (PIB) para el cuarto trimestre puede afirmarse que la economía continuó fortaleciéndose en 2004 y que la desaceleración del PIB en el tercer trimestre fue en gran parte transitoria. El crecimiento en los últimos seis trimestres ha sido superior al 4%, en promedio, y desde el tercer trimestre de 2003 la demanda interna ha crecido por encima de 5%.
  • Los factores más dinámicos por el lado de la demanda en 2004 fueron la inversión privada y las exportaciones. Con el crecimiento observado de la inversión, su nivel como porcentaje del PIB alcanzó una tasa superior a su valor promedio entre 1970 y 2004 (17%). El consumo de los hogares continuó recuperándose, y, en términos per cápita, alcanzó los niveles previos a la crisis de 1999.
  • Es probable que el crecimiento del PIB potencial haya aumentado en los dos últimos años como resultado del dinamismo de la inversión y de incrementos en la productividad total factorial. Sin embargo, debe recordarse que el PIB potencial no es observable y que su estimación está sujeta a incertidumbre.
  • Adicionalmente, el análisis de diversos indicadores no presenta una evidencia concluyente sobre el cambio en la brecha de producto (la diferencia entre el PIB potencial y el PIB observado).
  • El desempeño de la economía en los próximos trimestres depende, en buena medida, de la evolución del contexto externo. A este respecto, los mayores factores de incertidumbre son el comportamiento de los precios del petróleo y el ajuste de la política monetaria en los Estados Unidos.
  • Existe consenso entre los analistas sobre la magnitud total del ajuste requerido en las tasas de interés de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed), aunque persiste incertidumbre sobre el ritmo al cual pueda realizarse. En el Informe de Inflación de marzo de 2005, los pronósticos macroeconómicos suponen que continuará el ajuste gradual de las tasas de interés de la Fed hacia una posición neutral de la política monetaria.
  • En estas condiciones se mantendrían las principales tendencias de los flujos de capital hacia las economías emergentes, caracterizadas por la existencia de una amplia liquidez en los mercados internacionales y sin que se presenten repuntes importantes en las primas de riesgo-país. No obstante, esta percepción también está sujeta a la incertidumbre sobre la velocidad de ajuste de la tasa de interés de la Fed y la evolución de los desbalances externo y fiscal en la economía de los Estados Unidos.
  • Las últimas proyecciones de la balanza de pagos muestran que los ingresos de la cuenta corriente en 2005 podrían ser mayores que los previstos anteriormente. Por un lado, se ha venido registrando un aumento en los términos de intercambio que se puede mantener en lo que resta de 2005. Por el otro, la demanda de nuestros socios comerciales, especialmente de Venezuela, puede ser más dinámica frente a lo que se esperaba.
  • El comportamiento de los flujos de capital privados dependerá del contexto internacional y de la respuesta de los inversionistas internacionales y domésticos a los ajustes de la política monetaria en los Estados Unidos. De otro lado, si los ajustes en las tasas son mayores que los esperados, es posible que la entrada neta de capitales sea menor, e incluso podrían observarse salidas netas, con un impacto hacia el alza del tipo de cambio frente a sus niveles actuales.
  • Los resultados de los modelos de pronóstico de la inflación y del modelo central de simulación de la política monetaria muestran que existe una alta probabilidad de cumplir la meta de 2005 (entre 4,5% y 5,5% con 5%, como meta puntual) y reducir la inflación hacia el rango anunciado para la meta en 2006 (entre 3% y 5%). Esto ocurriría incluso con una devaluación moderada del peso, y sería consistente con una senda de la tasa de interés de corto plazo (tasa interbancaria TIB) que se mantendría en niveles iguales o ligeramente inferiores a los actuales (6,3%).
  • De otro lado, los resultados de algunos modelos muestran que si la economía colombiana crece en 2005 a tasas superiores a 4%, que impliquen una reducción de la brecha del producto, no habría margen para una caída de la TIB frente a sus niveles actuales. Por el contrario, las tasas de interés de intervención del Banco de la República deberían moverse el próximo año hacia una postura monetaria más neutral, tal como lo están haciendo los bancos centrales de la mayoría de las economías, tanto desarrolladas como emergentes.
  • Por otra parte, es posible que factores de oferta (aumentos en el acervo de capital y en la productividad), impliquen una brecha del producto inicial menor o un cierre más lento de la misma. En este caso existiría la posibilidad de mantener el estímulo monetario con el que actualmente opera la economía. Sin embargo, dada la incertidumbre sobre el estado y la evolución de la brecha, es difícil afirmar que alguno de los anteriores escenarios sea más probable que los otros.
  • Algo similar sucede en relación con la tasa de cambio. Las proyecciones de esta variable son muy sensibles a los escenarios sobre balanza de pagos, los cuales cambian a medida que hay más información pertinente, y según el ritmo y la duración del ajuste de las tasas de interés externas. Nuevamente, en este contexto es difícil definir una proyección definitiva sobre la evolución de la tasa de cambio en el corto y mediano plazos.
  • Finalmente, debe tenerse en cuenta que los modelos de pronóstico no previeron una parte del descenso en la inflación en el primer trimestre. Por esta razón, aún no es posible determinar si ese comportamiento de la inflación tiene un carácter permanente o transitorio.
  • La incertidumbre que existe sobre el nivel de la brecha de producto, la evolución futura de la tasa de cambio y la solidez del descenso reciente de la inflación hacen necesario reunir un conjunto mayor de información antes de introducir un cambio en la política monetaria.
  • Por las razones anteriores, en su reunión del 22 de abril, la Junta Directiva del Banco de la República decidió mantener la postura de la política monetaria con las siguientes implicaciones:
  1. Mantener la estructura de las tasas de interés del Banco. 
  2. Mantener cerradas la ventanilla y las subastas de contracción. 
  3. Mantener el esquema de intervención cambiaria discrecional.