San Andrés, 2010

Autor o Editor
María M. Aguilera, Javier Yabrudy, Omar F. Alvarado

En términos generales, la economía sanandresana tuvo balance positivo durante 2010. A pesar de ser una economía relativamente pequeña, el archipiélago logró alcanzar un repunte considerable en sus exportaciones, el número de empresas creadas aumentaron con respecto al año anterior, mientras que aquellas que cerraron sus puertas disminuyeron, algo que sin duda se respalda con las cifras de desempleo que es una de las más bajas a nivel nacional. 

 

El IPC de San Andrés durante 2010 presentó una variación de 3,2%, superior en 0,8 pp al registro de 2009. La tasa de desempleo, que cayó en 0,3 pp, registró un valor de 9,3% y la tasa de ocupación llegó a 58,0%. 

 

La creación de empresas estuvo impulsada principalmente por aquellas del sector comercio, que aumentaron de manera considerable tanto en número como en valor con respecto al año anterior. 

 

Las exportaciones no tradicionales de San Andrés aumentaron en 186,4% con respecto a 2009 y representaron 0,03% del total nacional, mientras que las importaciones se incrementaron en 20,9%. El sector industrial alcanzó la mayor participación dentro de las exportaciones con 95,1% y el sector agropecuario, caza y silvicultura lo hizo dentro de las importaciones con 69,9%. 

 

El sistema financiero mostró un comportamiento ambiguo. Por una lado, el crecimiento de las captaciones fue el más bajo de la región Caribe, mientras que registró el mayor aumento en las colocaciones, superior casi tres veces la variación promedio regional. 

 

En la isla, las cifras de transporte aéreo mostraron que el movimiento nacional de pasajeros se incrementó en 1,9% y el movimiento internacional de pasajeros lo hizo en 2,4%. Por otra parte, el crédito para vivienda nueva se incrementó en 28,9% y el crédito para vivienda usada lo hizo en 32,1%, resultados que a pesar de ser positivos no alcanzan los niveles que permitan cubrir la demanda por vivienda en las islas. 

 

Por último, el principal sector, turismo, presentó un crecimiento moderado, tanto el número de turistas llegados como los niveles promedio de ocupación hotelera, se incrementaron con respecto al año anterior, pero las cifras fueron inferiores a las expectativas que se tenían para 2010.