Revista del Banco de la República - Revista Banco de la República de noviembre de 2012

Los instrumentos de pago que la población habitualmente usa en sus transacciones son el efectivo, los cheques, las tarjetas débito y crédito, y en menor proporción, las transferencias electrónicas de fondos. Estos instrumentos dan inicio al proceso de pagos y se conectan con los sistemas de bajo valor. Su desarrollo se ha dado con el propósito de facilitar el intercambio, reducir los costos de transacción, garantizar la seguridad en el intercambio; y se han visto favorecidos por los avances en los sistemas de información, así como por el progreso tecnológico2. Aun cuando históricamente el efectivo ha dominado el proceso de intercambio de bienes y servicios, el surgimiento y la popularización de otros instrumentos de pago (provistos en su mayoría por establecimientos de crédito) ha generado algunos cambios en las formas de pago preferidas por la población, así como en su aceptación por parte de los comerciantes.

El entendimiento sobre la forma en la cual los consumidores pagan por sus transacciones es un tema que ha cobrado especial importancia para los bancos centrales, tanto en términos de eficiencia como de riesgo. En el primer caso, disponer de cifras que permitan conocer el uso de los instrumentos de pago puede contribuir a la labor de seguimiento que debe realizar el Banco de la República al funcionamiento de los sistemas de pagos de bajo valor. En el segundo caso, y considerando el papel del banco central como único competidor de los instrumentos de pago provistos por los establecimientos de crédito, se reconoce el potencial que estas cifras pueden representar como elementos indicadores de la confianza del público en los pagos que realizan en la economía.

Con el propósito de cuantificar tanto las preferencias de los consumidores por realizar pagos con efectivo, cheques y tarjetas bancarias, así como la aceptación de los mismos por parte de los comerciantes, el Departamento de Seguimiento a la Infraestructura Financiera (DSIF), del Banco de la República, diseñó un conjunto de preguntas para cuantificar el uso reciente de estos instrumentos de pago en Colombia.

La información, que proviene de esas preguntas, pretende describir las preferencias de la población y la aceptabilidad por parte de los comerciantes por los instrumentos de pago más comúnmente utilizados en las transacciones relacionadas con la compra al por menor de bienes no durables (tales como alimentos, vestuario, transporte y otros).

Esta encuesta constituye un primer intento por caracterizar las preferencias de la población por los instrumentos de pago que usan para liquidar sus transacciones, a partir de la percepción (opinión) de los encuestados. Por lo tanto, los resultados no pueden considerarse como cifras exactas sobre la forma en la cual consumidores y comerciantes dan finalidad a sus transacciones.