Sierra Nevada de Santa Marta: Economía de sus recursos naturales
La serie Documentos de Trabajo Sobre Economía Regional y Urbana es una publicación del Banco de la República - Sucursal Cartagena. Los trabajos son de carácter provisional, las opiniones y posibles errores son de responsabilidad exclusiva de los autores y no comprometen al Banco de la República ni a su Junta Directiva.
La Sierra Nevada de Santa Marta es una subregión estratégica para el Caribe colombiano, en la medida en que es la principal fuente de agua para tres de sus departamentos. Los ríos que nacen en la Sierra Nevada producen más de 10.000 millones de metros cúbicos de agua por año, de los cuales una parte se convierte en fuente de agua para 1.5 millones de personas. Las cuencas forman en la parte plana y circunvecina de la Sierra, valles aluviales que en conjunto suman más de 280.000 hectáreas de fértiles tierras. A partir del indicador de índice de aridez se pudo establecer que en la Sierra Nevada se cuenta con una aceptable disponibilidad de agua, pero así mismo se presenta una alta presión sobre sus cuencas. Estas presiones sobre las cuencas hidrográficas se intensificaron durante el siglo XX, con las diferentes olas colonizadoras que se presentaron en la Sierra. Desde la década de 1970 la inseguridad fue creciente en el macizo montañoso, con la presencia de cultivos ilícitos y grupos armados ilegales. En los primeros años del siglo XXI, las condiciones de seguridad han mejorado, lo que ha permitido que agricultores y campesinos regresen a sus propiedades rurales. Por el contrario, la seguridad de los indígenas se ha visto afectada, toda vez que parte de su territorio ha sido invadido por actores armados ilegales. En este sentido, todavía el monopolio de las armas no reposa en el Estado, ya que siguen existiendo grupos que amenazan la estabilidad de la subregión. Al garantizar las condiciones de seguridad, se lograría promocionar a la Sierra Nevada de Santa Marta como destino internacional del ecoturismo y turismo cultural. Así mismo, se aumentaría su producción de café, cacao, miel y frutas orgánicas, entre otros productos, de amplia demanda en el mercado internacional.