Francisco Ortega Acosta: Una vida vinculada laboralmente con el Banco de la República

Fotografía de Francisco Ortega Acosta cuando ingresó al Banco de la República en 1959

La vida laboral de Francisco Ortega Acosta transcurrió casi toda en la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes, 10 años, y el Banco de la República, 23, años. Nació en Bogotá y se graduó de bachiller en 1955 en el Colegio Cervantes. Estudió economía en la Universidad de los Andes. 
 

La primera vinculación laboral que tuvo Francisco Ortega fue con el Banco de la República en 1959 como estadígrafo. 
 

A comienzos de 1960 se retiró del Banco,  para volver como investigador económico a la Facultad de Economía de la Universidad de los Andes, donde además fue Director del CEDE y Decano entre 1968 y 1970. 
 

Regresó al Banco de la Republica como Asesor de la Junta Monetaria, cargo que ocupó del 15 de octubre de 1970 al 5 de octubre de 1975. De allí pasó a la Subgerencia Técnica. En este cargo uno de sus logros más importante fue el de haber promovido un ambicioso programa de becas para enviar a los jóvenes economistas del Banco para realizar maestrías y doctorados en Estados Unidos e Inglaterra, entre otros países. Esto permitió el fortalecimiento del capital humano de la institución, con lo que logró en los siguientes años formar un grupo de investigadores que consolidaron la capacidad técnica del Emisor para ponerla a tono con los tiempos. Con los años este programa se amplió a otras áreas del Banco y creció en tamaño. A la fecha, entre becas de doctorado (93), maestría  (229) y posdoctorado (1), un total de 323 funcionarios del Banco de la Republica se han capacitado en el exterior. Muchos han hecho carrera en la institución y otros se han desempeñado en altos cargos del gobierno nacional y en  universidades del país y del exterior, así como en organismos multilaterales. 
 

Después de una breve vinculación con la Federación Nacional de Cafeteros, entre 1984 y 1985, en septiembre de 1985 Francisco Ortega fue designado Gerente General del Banco de la República, cargo que ocupó hasta febrero de 1993. En esos años lideró la reforma a las funciones y el fortalecimiento de la autonomía del Banco que se plasmó en la Constitución de 1991, así como su desarrollo por medio de la Ley 31 de 1992. Murió en Bogotá el 1 de diciembre de 1994.
 

Por encima de todo su vida es un ejemplo de la dedicación al estudio, la investigación, la docencia y el servicio público con responsabilidad e integridad.