Antioquia, 2013

Autor o Editor
Banco de la República, DANE

La economía de Antioquia refleja recuperación con el crecimiento de su PIB en 4,3% en el 2012, este porcentaje fue superior al nacional. Sin embargo, la industria manufacturera se desaceleró. En cuanto a mercado laboral, los resultados obtenidos para el 2013 indican que la tasa de desempleo para Antioquia fue de 9,7% y para Medellín de 11,2%.

 

El IPC en Medellín fue de 1,8% en el 2013 y los grupos de mayor inflación de los hogares fueron educación, salud y vivienda. Los grupos de gasto con mayor participación fueron vivienda (48,8%), transporte (21,5%) y educación (12,7%).

 

Medellín alcanzó 65,6% en la tasa global de participación y la tasa de ocupación fue de 58,3%, con un registro de 1.714 miles de personas laborando. El desempleo disminuyó a 11,2%. El sector comercio, hoteles y restaurantes fue el mayor proveedor de empleo en el 2013. 

 

Antioquia fue el mayor exportador de Colombia en productos no tradicionales con US$5.600,5 millones. Por importaciones ingresaron US$7.503,6 millones, un aumento de 2,9%.

 

En la Región Andina Norte conformada por Antioquia, Norte de Santander y Santander se obtuvo una producción en promedio de 17.395 t mensuales de carne en canal de ganado vacuno, y 9.648 t de carne en canal de ganado porcino.

 

En cuanto a la actividad constructora, en el Área metropolitana de Medellín se extendió en promedio a 5.876.573 m2, según el censo de edificaciones esta área se distribuye en: proceso de construcción (77,8%), paralizada (9,9%) y culminada (12,4%).

 

Del área licenciada en Antioquia para construcción, Medellín participó con el 41,3%, y para vivienda fue 42,5%. La financiación de vivienda en Antioquia creció 30,2% y se destinó a vivienda nueva el 51,0% y usada el 49,0% distribuida en VIS 19,8% y no VIS 80,2%.

 

Los pasajeros movilizados en Rionegro con destino nacional aumentaron 35,6% e internacional 11,8%.

 

El balance de otras actividades del sector real no fue favorable en 2013. La industria mostró un modesto desempeño en producción y ventas, reflejado en los resultados financieros de las grandes empresas; el comercio minorista continuó con la baja dinámica iniciada en 2012, mientras la minería de metales preciosos se contrajo.

 

La actividad financiera registró una desaceleración en el ritmo de crecimiento de las colocaciones, especialmente las dirigidas al consumo y a la financiación de proyectos empresariales; en consecuencia, la transmisión de los impulsos monetarios tuvo un mayor efecto en la cartera de vivienda.